El Consejo de Ministros ha autorizado hoy cinco contribuciones voluntarias por un total de 166.200 euros que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación destinará a diversos organismos y programas internacionales vinculados a los sectores agrícola y pesquero, considerados de especial interés para España.

Estas aportaciones, realizadas de forma habitual, están dirigidas a apoyar el desarrollo de recursos agrícolas, ganaderos, cinegéticos, pesqueros y de la industria agroalimentaria y alimentaria. Su finalidad es reforzar la actividad de organizaciones internacionales que resultan clave para impulsar las prioridades del ministerio en el exterior y fortalecer la posición de España en dichos foros.

Las contribuciones aprobadas son las siguientes:

El Programa Cooperativo Europeo de Recursos Fitogenéticos (ECPGR, por sus siglas en inglés) recibe una aportación de 26.000 euros. Esta iniciativa, creada en 1980 a partir de recomendaciones del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Asociación Europea para la Investigación en Mejora Vegetal, es una plataforma en la que se abordan los principales retos y oportunidades relacionados con los Recursos Fitogenéticos para la Agricultura y la Alimentación (RFAA). Su objetivo principal es garantizar que los programas nacionales, subregionales y regionales en Europa conserven los RFAA tanto ex situ como in situ, para facilitar su acceso y promover su uso colaborativo, racional y efectivo.

A la “Iniciativa 4 por 1000” se destina una contribución de 20.200 euros. Lanzada en la Conferencia de París sobre el Cambio Climático de 2015 (COP21), esta iniciativa busca aumentar el contenido de carbono orgánico en los suelos para convertirlos en sumideros de carbono, mitigar el cambio climático y mejorar la resiliencia y adaptación a futuros escenarios climáticos. Además, aporta beneficios adicionales como la mejora de la fertilidad del suelo, lo que contribuye a la seguridad alimentaria, la conservación de la biodiversidad y el desarrollo sostenible, aspectos especialmente relevantes para España.

Para elConsejo Consultivo para los Mercados (MAC, por sus siglas en inglés)se aporta una cuota de 6.000 euros. Este consejo promueve la participación del sector pesquero en la elaboración y gestión de la Política Pesquera Común (PPC), con el asesoramiento a las instituciones de la Unión Europea y a los Estados miembros en cuestiones relacionadas con el mercado europeo de productos de pesca y acuicultura. Esta contribución se ajusta al reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo que regula la creación de consejos consultivos y permite que los Estados miembros apoyen técnica, logística y financieramente su funcionamiento

A las estrategias de laComisión General de Pesca del Mediterráneo(CGPM)de la FAO se realiza una aportación de 99.000 euros La CGPM es la organización regional de ordenación pesquera para el mar Mediterráneo y el mar Negro, fundada en 1949 y compuesta por 23 miembros, incluidos 22 Estados ribereños y la Unión Europea. España forma parte desde 1953. Sus objetivos son promover el desarrollo, la conservación y la gestión sostenible de los recursos pesqueros y la acuicultura. En 2021, los miembros aprobaron la Estrategia 2030 para una pesca y acuicultura sostenibles en la región, alineada con la agenda de desarrollo sostenible. La participación de España en esta estrategia fortalece su posición estratégica en la política pesquera y en los foros regionales.

LaRed de Información de Mercados Agrícolas del Mediterráneo (MED Amin, por sus siglas en inglés),recibe una contribución de 15.000 euros.Esta red intergubernamental, coordinada por el Centro Internacional de Altos Estudios Agronómicos Mediterráneos a través del Instituto Agronómico Mediterráneo de Montpellier, con el apoyo de la Secretaría del Sistema de Información de los Mercados Agrícolas y la Comisión Europea, facilita el intercambio de información y experiencias sobre el mercado de cereales, productos clave para la seguridad alimentaria de los países miembros. Su objetivo es reducir la volatilidad de precios con la mejora la transparencia y el funcionamiento del mercado. Tras la crisis provocada por la guerra en Ucrania, el plan de acción para 2024-2026 busca reforzar la confianza y el conocimiento de los mercados cerealistas, lo que requiere un apoyo financiero adicional, cubierto con esta contribución.