El Centro Integrado de Formación y Experiencias Agrarias (CIFEA) de Molina de Segura, dependiente de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, se ha integrado en la Red Nacional de Centros de Excelencia de Formación Profesional, consolidándose como un referente, tanto nacional como internacional, en el ámbito de la formación en el campo de la industria agroalimentaria, con una dotación de un millón de euros para su desarrollo.

El consejero, Antonio Luengo, visitó hoy las instalaciones acompañado por el director general de Atención a la Diversidad, Innovación y Formación Profesional, Juan García Iborra, y aseguró que “será un elemento catalizador en el diseño de todo un ecosistema innovador para la formación profesional agroalimentaria. Va a fomentar la innovación metodológica y tecnológica y la investigación aplicada en Formación Profesional, para que sirva de estímulo, ejemplo y apoyo a los centros de formación profesional de todo el territorio nacional y, de forma particular, para los centros de formación agrarios y de industrias alimentarias”.

En relación con el sector agroalimentario regional y nacional, como Centro de Excelencia “va a cooperar con instituciones de ámbito público y privado, y constituirá un polo tecnológico que atraerá el talento, generará y transferirá conocimiento, desarrollará nuevas tecnologías, potenciará la innovación y, sobre todo, la formación de nuevos profesionales con las competencias que demanda el mercado laboral en este sector”, aseguró Luengo.

Para conseguir mayor efectividad y alcance, sus actuaciones se desarrollarán en estrecha colaboración con los CIFEA de la Región, así como con otros centros de formación profesional y de excelencia, centros de referencia nacional afines al sector, empresas, organizaciones empresariales y sindicales, universidades, centros tecnológicos y centros de investigación. “Esta red de colaboradores potenciará sinergias y ayudará a multiplicar y difundir la innovación aplicada entre todas las partes interesadas, tanto del sector productivo como del formativo, así como a promover la internacionalización”, explicó el consejero.

El desarrollo de las actuaciones previstas se centra en acciones como la formación de docentes y personal de administración y servicios en trasformación tecnológica digital; la transformación digital del centro; la colaboración con otros centros en formación especializada e innovadora; la colaboración con el sector para la detección de nuevos perfiles profesionales y nichos de empleo en el sector agroalimentario; la revisión de currículos y adecuación a las necesidades de cualificación del sector y la propuesta y desarrollo de proyectos de investigación e innovación aplicada.

Además, la promoción, formación y apoyo para el desarrollo de iniciativas de emprendimiento en el sector agroalimentario, con especial atención en aquellas propuestas más innovadoras y sostenibles, de colectivos jóvenes, desfavorecidos o en riesgo de exclusión social y en concordancia con los ODS de la Agenda 2030; y la participación en programas e iniciativas internacionales a través de la Red Europea de Centros de Excelencia.

El CIFEA de Molina oferta anualmente 50 cursos de formación continua, con 700 alumnos, y otros 200 dirigidos a organizaciones agrarias, que reciben entre 2.000 y 2.500 alumnos; lo que sumado a otros cursos que se imparten en el centro, que se celebran al cabo del año, se sitúan en torno a un total de 4.500 alumnos. El centro tiene una vocación internacional, estableciendo redes de colaboración con muchos centros e instituciones de Europa y de Sudamérica e imparte formación técnica a delegaciones llegadas desde diversos países.