Los productores agrícolas apuestan por el control biológico para combatir las plagas de los cultivos, tanto en convencional como en ecológico y cada vez son más las hectáreas que utilizan estas prácticas para el manejo. En esta tarea, Agrobío se ha convertido en una empresa clave para el agricultor, que continúa así avanzando para cubrir las necesidades del sector con estrategias innovadoras que permiten asegurar la confianza de un mercado exigente que demanda productos sanos y seguros, libres de residuos.

En este sentido, los insectos beneficiosos utilizados para el control biológico de las plagas siguen jugando un papel estratégico aumentando incluso el ciclo productivo de la planta, su fortaleza y la calidad final del fruto.

Con el fin de mejorar las producciones y facilitar la implementación de las estrategias preventivas, el equipo de Investigación de Agrobío y su departamento de Desarrollo Técnico ha avanzando para ofrecer soluciones a los retos del sector. La optimización de los sistemas de cría, las dietas complementarias y la mejora de las cepas son algunos de los hitos que están marcando esta etapa de la empresa almeriense. No en vano, en un campo que cada día se enfrenta a nuevas plagas y enfermedades es fundamental seguir creando conocimiento y herramientas de manejo eficaces para mantenerlas controladas.

Novedades

Tanto el ácaro depredador A. swirskii, SWIRScontrol, como los nuevos Orius laevigatus, ORIcontrol Cold y Plus, que esta campaña ha lanzado en exclusiva Agrobío, se han instalado en muchos de los invernaderos de pimiento y otros cultivos hortícolas y ornamentales, y están realizando un control extraordinario de plagas como trips y mosca blanca.

Estos Orius seleccionados genéticamente y fruto de un proyecto de colaboración entre el equipo de I+D de Agrobío y el catedrático Pablo Bielza (UPCT), son más resistentes y voraces que un Orius estándar; capaces de aguantar más días en el cultivo en ausencia de plaga, comer más o resistir bajas temperaturas sin perder su capacidad de poner huevos.

Además, Agrobío este año refuerza el biocontrol con el desarrollo de nuevo alimento enriquecido para multiplicar y fortalecer tanto ácaros como chinches depredadores. Esta línea de trabajo, que comenzó con la patente de Agrobío ‘alimentación con presa directamente sobre la planta’, es clave para que el control biológico sea un éxito en cultivos sin polen como el pepino y cucurbitáceas en general, o en el establecimiento temprano de los auxiliares, como es el caso del pimiento, donde los agricultores buscan adelantarse a la llegada de las plagas.

No obstante, dependiendo de las condiciones climáticas, el histórico de la finca y la presión de otras plagas es importante continuar con las sueltas de una fauna auxiliar variada y así mantener bajo control otros insectos como la araña roja o el pulgón, donde es fundamental establecer una estrategia preventiva combinando parasitoides y depredadores, como sírfidos, crisopas, aphidoletes y coccinelidos; todos disponibles en la gama de enemigos naturales de Agrobío.

Para llevar a cabo esta práctica, Agrobío cuenta con un equipo experto de técnicos que trabajan al lado del agricultor a pie de campo, asesorando y a acompañando a los profesionales del sector para obtener los mejores resultados.