Luengo celebró el logro que representa la obtención de este distintivo de calidad, “que es fruto del esfuerzo y el empeño de los agricultores que laboran, bregando con las inclemencias de todo tipo, por la calidad de un producto que lleva el nombre de Cieza y de la Región de Murcia por el mundo, y que se acoge, de ahora en adelante, a una normativa europea que es garantía de que cumple con unas exigencias superiores al resto”.

“En este camino, los productores y el Gobierno regional vamos de la mano, porque todos los pasos que se den para subrayar la calidad de lo que se produce en la Región de Murcia van a contar siempre con nuestro respaldo, asesoramiento y acompañamiento en el proceso por el que se da cumplimiento al itinerario determinado por la normativa europea. Porque esa es nuestra vocación y ese nuestro compromiso”, subrayó el consejero.

Antonio Luengo recordó que la IGP “pone de relieve la relación entre la región geográfica específica y el nombre del producto cuando su calidad, reputación u otras características específicas son atribuibles fundamentalmente al origen geográfico”. Destacó que este carácter especial se significa “en ese etiquetado distintivo que va a ser usado en adelante y va a servir de tarjeta de presentación ante los consumidores”.

A partir de este momento, la Comisión Europea deberá realizar observaciones a la solicitud de registro presentada. Finalizada esa fase, la Comisión publicará la solicitud en el Diario Oficial de la Unión Europea y abrirá un período de oposición de tres meses. Si no hay oposición motivada se registrará la solicitud y el etiquetado IGP podrá usarse con carácter internacional.