Tras la comparecencia conjunta de ambos sindicatos, el pasado 10 de noviembre, los convocantes han continuado su ronda informativa al sector para una jornada donde se llama a la paralización del campo y cuando también está prevista la concentración de delegados sindicales al mediodía frente a las puertas de la Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (CROEM). José Ibarra, secretario comarcal de CCOO en Cartagena y responsable de la negociación colectiva, ha señalado a FHMURCIA que confían plenamente en la respuesta de los trabajadores. “Es una huelga ante un triple frente, la patronal, el Gobierno regional y Estatal. Los tres tienen que resolver cuestiones pendientes al trabajador”.

La lista de demandas de CCOO y UGT es extensa “porque no se trata de un convenio atascado sino que hay un cúmulo de cuestiones que se están arrastrando desde hace años” y que, a juicio de Ibarra, han convertido a los trabajadores del campo de Murcia en “los peores pagados de toda España”. Como algunas de las claves de esta problemática están la “multiplicidad de convenios colectivos. Es un disparate que haya uno o dos convenios por cada cultivo hortofrutícola que, además, son obsoletos”, señaló José Ibarra.

Argumentación

El manifiesto de motivos de los sindicatos para esta convocatoria tiene, entre sus pilares, el incumplimiento del salario mínimo interprofesional (SMI) “en muchas empresas murcianas” por lo que se ha interpuesto conflictos colectivos para solucionarlo. Además, algunas patronales del sector estarían “dificultando hasta extremos insoportables” la negociación de los dos convenios colectivos más importantes del campo murciano como son el convenio Agrícola, Forestal y Pecuario y el convenio de Empresas Cosecheras y Productoras de Tomate, afectando a unas 40.000 personas. Con ello, recuerdan desde CCOO y UGT, “se está incumpliendo el Acuerdo Regional para el impulso de la Negociación Colectiva firmado en 2019”. Igualmente, piden que se pongan en marcha “de manera urgente” medidas para reconducir el “recurso abusivo de las empresas de trabajo temporal, que precarizan los derechos de los trabajadores del campo”.

Entre las reivindicaciones de los sindicatos también está el aumento de las inspecciones de trabajo o la reclamación del Gobierno Estatal de acabar con la discriminación de los fijos discontinuos o atajar los casos de acoso sexual que se han producido a trabajadoras del campo murciano en los meses de septiembre y octubre.

Como cabría esperar, desde el anuncio de la convocatoria de huelga, patronal y organizaciones no han empatizado con el argumentario de los sindicatos y, desde organizaciones como COAG Murcia, han considerado que “no está justificada”. Más costes para el agricultor Francisco Gil, miembro de la Ejecutiva de COAG, señaló en declaraciones a FHMURCIA que, con las dos subidas del salario mínimo en enero de 2019 y enero de 2020, se ha incrementado un 8,45%. “Eso tiene una repercusión importante en el convenio agropecuario” indicó.

Más aún, Gil lamentó que “la renegociación del convenio supondrá subir aún más el sueldo sin tener una revisión del resto de normativas, lo que hace preocupante el asunto” en un panorama donde el Gobierno pretende llevar el SMI a los 1.200 euros mensuales. El representante de COAG recordó también otras dificultades que ponen entre la espada y la pared a los empresarios agrícolas como la bajada de precios hortícolas en un contexto “en el que nos impiden poner precios mínimos” o el crecimiento “disparado” del coste del agua.

Almudena Fernández