Un encuentro, por videoconferencia, en el que participaron el director general del Agua, Sebastián Delgado, su homólogo de la Junta de Andalucía, Sergio Arjona, representantes de la Diputación de Alicante y el director del Instituto Euromediterráneo del Agua, Francisco Cabezas, en el que Delgado lamentó que las modificaciones que se están planteando “suponen una grave amenaza para el futuro del trasvase Tajo-Segura y del Levante, por lo que debemos unir nuestras voces para defender juntos que no se lleven a cabo”.

En la reunión se puso de manifiesto que los tres territorios “pueden ser los más afectados por el próximo ciclo de planificación del Tajo, ya que se está diseñando con unos parámetros que indican recortes de agua para nuestros agricultores y regantes, que lo que necesitan es seguridad para planificar las próximas plantaciones”

Delgado afirmó que “es fundamental que nuestra opinión se escuche en dicho organismo de Cuenca porque somos los grandes perjudicados y no tenemos ninguna representación en los órganos de gobierno de la Confederación Hidrográfica del Tajo”.

De la misma manera, y frente a medidas como el aumento del caudal ecológico, se detalló que “existen otras formas de mejorar el estado ecológico y químico de dichas aguas, como pueden ser actuaciones sobre la morfología de los cauces, mejorando el espacio fluvial, o actuaciones sobre el estado químico de las aguas, reduciendo la contaminación puntual producida por malas condiciones de depuración de las aguas residuales urbanas”, explicó el director general.

Por último, los participantes concluyeron en la necesidad de “avanzar en la elaboración de un Plan Hidrológico Nacional que aborde, de forma decidida, la falta de recursos hídricos en el Levante español, haciendo que el desarrollo de nuestra economía y nuestra sociedad no se vea mermado por un recurso escaso, pero del que realizamos un aprovechamiento óptimo”.